Conjuntivitis
¿Qué es la
Conjuntivitis?:
Es la
inflamación
de una
membrana
transparente
que
recubre
la parte
blanca
del ojo
(esclera).
Causas más comunes.
La etiología o su origen suele ser muy variada y pueden ser:
• Alérgicas
• Bacteriana
• Viral
• Cuerpo extraño
• Química
• Traumática
También puede verse afectada por factores del medio ambiente, como polvo, humo de carros y de cigarrillo, cosméticos, etc.
Síntomas más habituales de la conjuntivitis:
Dependiendo de la causa, cada conjuntivitis tiene su característica propia. El paciente con conjuntivitis se encuentra muy irritado en su carácter debido a la inflamación experimentando fotobia, intenta frotarse los ojos para tratar de calmar la molestia sin lograr conseguirlo, puede llegar a tener un poco de dolor al tratar de abrir los párpados. Además del enrojecimiento normal que se produce, suele presentarse secreciones (lagañas) que puede ser de color blanca, verde o amarilla. En varias ocasiones los ojos suelen amanecer pegados, esto es una característica de la conjuntivitis bacteriana, que a su diferencia de la viral la secreción que se da no tiene mayor relevancia clínica.
En las
épocas
de
invierno
se ve un
incremento
en la
consulta
oftalmológica
por
presentar
inflamación
conjuntival
que
puede
ser
bacteriana
o viral.
Otra
variante
y que es
la más
común
que
afecta a
millones
de
personas
en el
mundo
entero,
es la
conjuntivitis
alérgica.
En la
cual el
síntoma
esencial
y
llamativo
es la
picazón
de los
ojos. En
la cual
los
individuos
la
mayoría
del
tiempo
tienen
los ojos
rojos y
que
estéticamente
se ven
afectados
por
tener
siempre
la
conjuntiva
enrojecida
e
hinchada
(quemosis).
Se suele
presentar
en
pacientes
con
historial
de
enfermedades
alérgicas
a
factores
externos
e
incluso
el asma
se
encuentra
relacionada.
¿Cómo se previene?:
Las medidas de higiene son primordiales cuando se trata de conjuntivitis infecciosa. El lavado constante de manos tanto del paciente y como de la persona quien este atendiendo al mismo debe de ser estricto, para tratar así de evitar el contagio de personas sanas. Además antes de la aplicación de la medicación las manos también deber ser lavadas.
La manera del contagio suele ser de manera indirecta o directa, en la cual las personas sanas entran en contacto con las secreciones del ojo infectado. Si el origen es bacteriano o viral, la presentación de los síntomas es distinta y el tiempo en desaparecer los síntomas también varía.
Tratamiento:
La conducta en el tratamiento es mediante antibióticos tópicos, además de lubricantes oculares, en la mayoría de los casos remite con el tratamiento habitual.
Cuando los casos se vuelven resistentes al tratamiento empírico, la conducta es hacer un frotis para realizar un cultivo en laboratorio y determinar la etiología causante, así se planteará un nuevo tratamiento específico e inclusive el uso de medicamentos sistémicos.
Además cuando los síntomas se tornan muy incómodos, su médico oftalmólogo está en la obligación de prescribir antihistamínicos por vía oral para mitigar las molestias, siempre y cuando no sea alérgico a alguno de sus componentes, solo debe ser administrado bajo vigilancia médica.
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